
Aunque las obras no han finalizado, este año entre otras dependencias hemos inaugurado nuestro molino de aceite para la extracción artesanal de uno de los mejores aceites de oliva de producción ecológica que podemos encontrar. Y como de una rueda de favores que continuamente el Universo nos está mostrando, Ezequiel uno de los voluntarios que forma parte de nuestro proyecto ha sido el enlace para que la finca ecológica Tierrabuela y la asociación casa de acogida Pepe Bravo, cooperen en un hermoso proyecto de recogida de aceitunas y extracción artesanal de aceite virgen de oliva.

Sus palabras reflejan desde el corazón lo que para él ha sido esta experiencia:

Ama lo que haces y no trabajaras ni un solo día en tu vida!
Todo comenzó con una llamada interior, con una necesidad de conexión con la tierra, con un prestar atención a los arboles, a limpiarlos, a cuidarlos, y entender así que el árbol es el reflejo de uno mismo, y que al cuidarlo y sanarlo, también te lo está haciendo a ti mismo ….. Y con este sentir comenzó la historia…. 200 olivos, entonces día tras día y arbolito tras arbolito se fue notando todo este trabajo, ya que poco a poco ibas observando cómo el sol penetraba por todos los rincones de la copa de cada olivo. Y el primer error para aprender: los árboles no estaban correctamente limpios, por lo que había que volver a empezar arbolito tras arbolito, y de esa forma sentir que también ibas despejando esa bruma interior, permitiendo que la luz y el sol penetraran en ti.
Y como quien mira una esfera ….. aparece mi segunda casa, la Casa de acogida Pepe Bravo, esa escuela contemporánea de amor incondicional. Negociaciones y mentes, en vez de corazón, fueron entorpeciendo un poco el proceso, pero finalmente ( y como el corazón siempre manda ) la acertada decisión de que el aceite de oliva extra se produjera en la Casa Pepe Bravo
La planificación,(cabe destacar el desconocimiento en cuanto a producción y recolección de olivos por parte mía ), tomó un tiempo más que prudencial, donde nuevamente la Casa de Acogida cumplió un rol fundamental en el seguimiento de todo el proyecto: desde la explicación certera de cómo recolectar olivos, el tiempo justo para obtener el mejor aceite, la recogida diaria de las aceitunas y la obtención del mejor aceite de oliva que he conocido en veinte años como chef ejecutivo en varios emprendimientos de restauración.

“Amor de Olivo” (nuestro aceite) es el resultado final de escuchar ese llamado del corazón donde se unifica el trabajo en equipo, la alegría, la unión de dos proyectos con la finalidad de sostenerse y apoyarse.

Desde la finca Tierrabuela, sólo tenemos palabras de agradecimiento hacia la casa de acogida Pepe Bravo y un profundo amor a su fundador que, desde donde sea que esté, sigue prestando su amor incondicional y protección a todos los que acuden a su Casa.
¡Gracias Pepe Bravo!